Cada año, las empresas gastan millones de euros en tareas que, aunque importantes, no producen ningún valor significativo. Tareas como el procesamiento de facturas, la gestión de existencias o el onboarding, pueden llegar a ser bastante repetitivas y engorrosas. Sin embargo, la buena noticia es que la mayoría de estos procesos pueden realizarse ahora mediante la Automatización Robótica de Procesos (RPA).
La RPA utiliza software que puede realizar la mayoría de las interacciones entre humanos y ordenadores, llevando a cabo tareas sencillas o basadas en reglas sin errores, a gran volumen y velocidad. La RPA es uno de los temas de los que más se habla en el panorama actual de las TI. Según The Economist, el 91% de las organizaciones encuestadas utilizan tecnologías de automatización y el 94% de los directores ejecutivos que han incorporado RPA creen que ha aumentado la productividad.
Sin embargo, la RPA es sólo uno de los distintos componentes de la hiperautomatización.
Según un estudio de Gartner, el objetivo de la hiper automatización es automatizar el mayor número posible de procesos dentro de una organización. Esto implica automatizar procesos utilizando inteligencia artificial (IA), RPA, automatización de API (DPA) y otras tecnologías para que funcionen sin intervención humana. La automatización integral de un proceso de facturación combina:
- IA para leer facturas
- Automatización API (software intermediario que permite la comunicación entre dos aplicaciones), para activar el proceso de automatización cuando se recibe un correo electrónico;
- y RPA para insertar la información de facturación en el software heredado.
Este proceso es un buen ejemplo de hiper automatización.
Pero, ¿cuáles son las ventajas de la hiper automatización?
Desde 2020, la hiper automatización encabeza la lista de las principales estrategias para Gartner. La hiper automatización transforma las empresas reestructurando los procesos empresariales, eliminando las tareas monótonas y automatizando las tareas manuales. Este método permite obtener varios beneficios importantes para las empresas, como completar las tareas de forma coherente, precisa y rápida. Esto, a su vez, reduce los costes y mejora la experiencia del cliente y la confianza de los empleados.
Pero, como ocurre con cualquier tecnología nueva, es posible que las empresas no estén preparadas para utilizarla debido a la falta de precisión y calidad de los datos y también a la falta de recursos con los conocimientos técnicos necesarios para utilizarla.
Sin embargo, aquí es donde entra en juego la plataforma Power Automate de Microsoft. Microsoft Power Automate es una plataforma de bajo código/sin código que puede ser utilizada por usuarios empresariales y desarrolladores ciudadanos y no requiere conocimientos previos de desarrollo, aunque también puede ser utilizada por desarrolladores para automatizaciones más complejas.
Microsoft Power Automate tiene dos componentes principales: Power Automate Cloud, que es el «corazón» de la plataforma y Power Automate Desktop, que es el elemento central para la automatización.
- El primero contiene más de 470 conectores de las aplicaciones más utilizadas, como la mayoría de los productos de Microsoft, SAP, Salesforce, entre otros. Estos conectores permiten la automatización de API’s, así como la automatización por eventos.
- El segundo es un software de arrastrar y soltar que, con más de 400 acciones, proporciona un enfoque simplificado para automatizar software heredado instalado en sitios que no disponen de API.
Estos dos componentes combinados con AI Builder (un componente de Power Platform, que contiene un gran número de modelos de IA pre desarrollados) hacen de Power Platform una solución sencilla y completa para las empresas que buscan aumentar su productividad con la automatización.